Afrontando exámenes con tranquilidad: Claves para reducir el estrés

La época de los exámenes puede ser una de las más difíciles para los estudiantes, debido a que estas pruebas determinaran gran parte de su futuro como profesionales. 

¿Qué factores se hacen presentes antes del examen?

Los exámenes son evaluaciones que tienen como finalidad poner a prueba los conocimientos adquiridos por los estudiantes, estos pueden variar de temática, dependiendo de lo que estudie el estudiante. De igual manera, los exámenes ofrecen una aprobación determinada por el profesor, el cual se encargará de determinar si las respuestas son satisfactorias.

Aunque estos son frecuentes en cualquier institución o academia de estudios, muchos estudiantes sin importar la edad suelen presentar signos de ansiedad o estrés antes de realizar los exámenes, cuando se encuentren en ellos y después de haberlos terminado, lo cual puede afectar en gran manera el desenvolvimiento del estudiante, haciéndolo fallar aun cuando conozca las respuestas.

Por lo general y cuando sabemos que debemos estudiar para realizar un examen, sensación que se incremente mientras más cerca estemos del día de la prueba, se hacen presentes emociones que pueden afectar nuestra capacidad de estudio y de aprendernos los temas a tratar, estos pueden ser:

Ansiedad

También se le conoce como ansiedad anticipatoria, la cual se hace presente no solo momentos antes del examen, sino mientras estudiamos. 

Aquí si el estudiante no se siente lo suficientemente preparado, puede llegar a tener pensamientos negativos en cuanto a su capacidad de estudio, sentirse poco preparado e incapaz de entender el tema del examen. De igual forma, los miedos afectan la confianza en sí mismos lo que ocasiona que se desanimen y no sientan la necesidad de estudiar.

imagen en dibujo de ansiedad

Estrés

Antes de presentar el examen, es posible que comiences a sentir estrés, ya que las preocupaciones de no sentirte preparado, de saber si has estudiado correctamente los temas que se tratarán, si tendrás el tiempo suficiente, todo esto va ocasionando que acumules estrés. Incluso existen casos de personas que se han enfermado severamente a causa del estrés provocado por la época de exámenes, ya que estudian por largas horas, temas extensos y su ritmo de vida gira en torno a esto, saturándose de los estudios y por lo tanto, enfermando su cuerpo. 

Nerviosismo

Durante el examen, es probable que puedas, debido a los nervios, sentir un bloque, lo que ocasionará que no recuerdes nada de lo que hayas estudiado, esto se origina también gracias a los estados de ansiedad y estrés que suelen convergen en este momento, por lo que podrás incluso afectar tu estado fisiológico, provocando que sudes, tiembles, dolores de estómago o cabeza. 

Incluso la conducta puede verse afectada, haciendo que tartamudees, hagas gestos no usuales en ti, reírte nerviosamente.

Preocupación

A pesar de que el  examen ya haya terminado, es probable que podamos sentirnos con una fuerte preocupación después de este, dado que comenzaremos a dudar de las respuestas y soluciones que hayamos colocado, a comparar respuestas con compañeros que hayan terminado o incluso imaginarnos que pasamos por alto alguna respuesta de suma importancia.

¿Cómo afrontar esto?

Es posible que hayas sentido todo esto en algún punto de tu vida como estudiante, sin embargo, existen varias formas con la que puedes sobreponerte a esto:

Respiración

Es de gran utilidad aplicar método de respiración, antes, durante y después del examen. Se ha comprobado que controlar la respiración mediante ejercicios, ayuda a que el cuerpo se tranquilice y se relaje, lo que te ayudará a calmarte ante un examen y de esta forma, podrás acceder a toda esa información que has aprendido para presentarlo.

Estudia con tiempo

En muchas ocasiones los problemas que tenemos al momento de presentar un examen se deben a que no nos sentimos preparados completamente para este, dado que usualmente, solemos estudiar uno o dos días antes, e incluso horas antes de presentarlo. 

Lo más recomendable es que manejes completamente el tema a tratar, estudiando previamente al examen, ya sea un par de semanas, dedicándole varias horas de estudio para que, al momento de presentarlos, lo hagas de manera efectiva.

Mente positiva

Esto va más allá de creer que nos irá bien solo porque sí, se trata de que no nos dejemos someter por pensamientos de miedo y nervios, los cuales suelen producirse por eventos que todavía no han pasado.

Por ejemplo creer que saldremos mal, ya que esto ocasionará que al momento de estudiar no puedas aprender correctamente y te sientas incapaz, además durante el examen, también sentirás que no sabes nada y por lo tanto, así será.

mente positiva

No te excedas

Puedes creer que pasar mucho tiempo estudiando, desvelándote y aprendiendo una gran cantidad de contenido será beneficioso para ti durante el examen, esto no es así. El exceso es malo en todo sentido, incluso para los estudios, así que puedes establecer horarios de estudios que no sean intensos y flexibles para ti.

Diviértete

También debes sacar tiempo para entretenerte y distraerte, de esta forma, olvidarás por un rato los estudios y al volver a tomar los libros y cuadernos con notas, te sentirás más fresco y con más ánimo para seguir estudiando.

Descansa

Es importante que respetes tus horas de sueño y, de estudiar bastante durante el día, te tomes ciertas horas del día para descansar, ya que esto evitará que te satures de información y también ayudará a que comprendas mejor lo que has aprendido anteriormente mientras estudiabas.