El ideal de una sonrisa radiante y perfecta tal y como las que se muestran en los comerciales y en los diferentes medios de comunicación, poco a poco se ha apoderado de gran parte de la población encontrando en el blanqueamiento dental la opción número uno para asegurarse de revelar unos dientes bonitos que pasen a convertirse en parte activa de una carta de presentación que cause una constante admiración.

Así las cosas, la moda de blanquearse los dientes sigue creciendo como la espuma y se posiciona como un tratamiento estético necesario para sentir mayor seguridad al momento de socializar. En consecuencia, someterse a diversas técnicas de la mano de profesionales  y pasar por ciertas incomodidades con tal de enmascarar el proceso de oscurecimiento natural por el que pasa la dentadura y que de hecho se debe tanto a los hábitos alimenticios como a la genética, es ahora un propósito al que se le presta bastante atención y aquí te contamos todos los detalles.

Técnicas para el blanqueamiento dental

A pesar de las muchas alternativas que pueden encontrarse en el mercado, si se quiere efectividad lo mejor es sacudir a una clínica dental para que bajo la orientación de un profesional se lleve a cabo un proceso que conduce a aclarar varios tonos el color de los dientes.

Entre las técnicas de blanqueamiento dental más conocidas se encuentra el tratamiento con férulas transparentes y un gel blanqueador que el paciente usa en casa durante las noches, el blanqueamiento dental láser que sobresale por sus espectaculares resultados y por su rapidez y finalmente el blanqueamiento dental combinando donde se integra la acción de las férulas a medida con sesiones de lámparas led.

Consideraciones sobre este tratamiento dental

Siempre y cuando el paciente no presente caries o sensibilidad dental, es posible llevar a cabo este tratamiento dental estético sin inconvenientes. Respecto a sus resultados estos pueden ser muy o poco contundentes de acuerdo al tipo de manchas que presente la dentadura ya que entre más anaranjadas o grises sean estas más complejo resulta aclarar, de esta manera la evaluación previa brindará la información para saber cuál técnica elegir.

Cuidar con mayor esmero la higiene dental es fundamental una vez el blanqueamiento esté culminado, de igual manera limitar en la medida de lo posible bebidas carbonatadas, café, vino, las fresas, el curry, el tomate y obviamente el tabaco son medidas indispensable para mantener los resultados. En función del esmalte dental que tenga el paciente, el médico podrá aconsejar sobre la tonalidad que mejor pueda adaptarse, lo mejor es dejarse asesorar ya que muchas personas se obsesionan con el blanco perfecto algo que no va a resultar muy favorecedor pues va en contra de un aspecto natural y armonioso.